
16 Mar Finanzas “sin traje”: Mi nuevo proyecto
Hace poco más de un año escribía mi primer post para dar a luz mi primer empresa: Investalia.
Emprendía en solitario, después de muchos años trabajando para una importante entidad bancaria, para iniciar mi propio camino en el amplio mundo de las Finanzas.
Buscaba, este fue el motor del cambio, aportar mi punto de vista, mi voz y mi bagaje personal y profesional en este sector a veces tan tradicional, conservador y aburrido.
Ante todo quería, y este sigue siendo mi empeño, acercar a emprendedores como yo, autónomos y empresarios esta parte del conocimiento tan vital en nuestras vidas -y negocios- con un poco de espontaneidad, minimizando dentro de lo posible la sensación de miedo que habitualmente provoca; sin dejar de lado la rigurosidad.
Y por qué no, ¡con un poco de humor! Al fin y al cabo las Finanzas, aunque cueste de creer, también pueden ser divertidas.
Establecer un canal de comunicación donde compartir información especializada y actualizada con todos ellos, ofreciendo a su vez diferentes servicios a través de las nuevas herramientas, ahora más intuitivas, que nos ofrece la tecnología.
Estaba viviendo el cambio en el sector financiero y no quería ser una espectadora más.
Quería poner toda esa información al alcance de aquellos negocios que quieren seguir creciendo y al servicio de las personas que crecen con ellos. Robarles unos minutos del día a día de sus empresas para ayudarles a optimizar sus procesos en pro de su rentabilidad, tanto de dinero como de tiempo; a favor de su vida personal.
¿Y por qué ahora un cambio? ¿He renunciado a mi sueño, al mundo de las Finanzas?
Rotundamente no.
Mi sueño es, y sigue siendo, aportar mi grano de arena para impulsar a los que se atrevieron a apostar por sus proyectos y los conviertieron en negocios. Las pequeñas y medianas empresas que tiran adelante este país que ya amo como si fuera el mío.
Hoy inicio una nueva etapa, tomo una ligera pero importante desviación en el camino con un único objetivo, mejorar significativamente mi primer empeño.
Y estoy aquí de nuevo, con lo más parecido a otro “primer post” para contarte qué implica este cambio.
Qué vas a ver en mi casa virtual a partir de hoy.
¡Tenía muchísimas ganas contártelo!
Estar de nuevo semanalmente aquí me hace una ilusión tremenda.
Aunque esta es sobretodo una “continuación” más que un estreno, siento el mismo dolor de barriga que la primera vez.
Pero no quiero alargarme, sabes que valoro mucho tu tiempo y es mejor que vaya al grano. Además, tengo muchas ganas de compartir contigo en qué he estado trabajando en los últimos meses y no puedo esperar más.
Como ves llego con cambios…
El primero y quizás más evidente es el cambio de nombre y de imagen.
Para mostrarme más cercana y mostrar así las Finanzas de una manera más próxima, comprensible y “sin traje” he decidido utilizar mi nombre propio. Todo lo que comparto contigo lo he experimentado por mi misma y puedo hablarte de ello en primera persona y de tú a tú. Me ha parecido que era un cambio natural que tarde o temprano tenía que llegar.
El cambio de imagen representa el mismo giro que hizo mi manera de pensar cuando decidí emprender, aunque hasta ahora no lo había mostrado de manera explícita.
El traje, aunque es una prenda de vestir que me sigue gustando, se quedó guardado en el armario. La manera en que me muestro ahora, hablando de finanzas, me hace sentir que soy más yo que nunca. Pienso que es una manera de ser más coherente.
El segundo, ampliación de servicios.
Divulgación, formación, consultoría, mentoring en finanzas… Mi objetivo es ambicioso, lo sé. Pero voy a poner todo de mi parte para conseguirlo.
Quiero que el tema dinero deje de ser el problema para la mayoría de emprendedores, autónomos y empresarios. Deseo que puedan llegar a la información y que esta los impulse más lejos.
Con esta idea clara en mi mente he creado recursos gratuitos, conferencias, este blog con contenido que previamente he verificado o testeado según el caso, cursos de diferentes niveles y precios y mi servicio personalizado de consultoría.
Un año emocionante.
Como ves el balance que hago de mi primer año no puede ser otro que positivo. No te diré que todo ha sido un campo de rosas porque te mentiría, pero el esfuerzo ha valido realmente la pena; incluido este giro que he tomado en el camino. No es nada fácil parar cuando apenas has levandado el vuelo para evaluar si estás trazando correctamente la línea que habías marcado.
Mi objetivo es el mismo y quería hacerlo todavía mejor, este es mi sueño.
En este año quisiera destacar, además de todas las novedades que te comento, y no de manera menos importante, las oportunidades que he tenido de trabajar en proyectos motivadores.
Poner al servicio de personas que viven y luchan por sus negocios mi conocimiento y experiencia, y mejorar mano a mano con ellos y junto a ellos es aquello por lo que empecé esta apasionante aventura.
¡Tengo muchísimas ganas de seguir adelante!
¿Me acompañas?